Comenzaremos por lavar muy bien los puerros y separar la parte blanca de la parte verde. No deseches esta última, porque podrás utilizarla para otros platos.

También retiraremos la base de la raíz de cada rama de puerro.

Luego, picaremos la parte blanca de los puerros en ruedas, y las reservaremos.

Enseguida nos ocuparemos de las patatas. Comenzaremos por pelarlas y luego, las picaremos en cubos. También lavaremos la cebolleta, le quitaremos la raíz y la picaremos en trocitos.

Ahora calentaremos una sartén grande o una cacerola antiadherente, con un chorrito de aceite, a fuego medio-bajo. Una vez caliente, vamos a sofreír los trozos de cebolleta durante tres minutos, removiendo con frecuencia.

Pasado este tiempo, vamos a incorporar los puerros y los cocinaremos durante cinco minutos más.

Luego, añadiremos los trozos de patatas, salpimentaremos al gusto, mezclaremos y cocinaremos todo por dos minutos.

Lo siguiente será incorporar el caldo a la preparación. Lo ideal es que ya esté caliente. Para esto, puedes pasarlo rápidamente por el microondas antes de añadirlo.

Ahora taparemos y dejaremos que el caldo y las verduras se cocinen durante media hora.

Pasado el tiempo de cocción, transvasaremos la preparación a una licuadora, con mucho cuidado de no quemarnos. Luego, agregaremos la nata, la mantequilla y salpimentaremos ligeramente.

Procesaremos todos los ingredientes hasta obtener la consistencia deseada para la sopa. Luego probaremos para verificar la sazón y si hace falta, la corregiremos con más sal y / o pimienta. Si ese es el caso, volveremos a mezclar todo.

Opcionalmente, puedes colar la preparación, para obtener una textura más fina.

Ahora hay que dejar que la vichyssoise se enfríe. Mientras tanto, lavaremos las ramas de cebollino y lo picaremos muy finamente, para decorar cada plato de sopa al momento de servirlo.

Cuando la sopa haya alcanzado una temperatura ambiente, la llevaremos al refrigerador. No es recomendable hacerlo antes, puesto que se trata de un plato que incluye lácteos, los cuales pueden ser sensibles a los cambios bruscos de temperatura.

Cuando la sopa esté fría, ya estará lista para servirse. Decoraremos con el cebollino picado previamente y opcionalmente, con un chorrito de aceite de oliva.