Tal y como lo adelantamos al principio de esta nota, hay que poner a remojar los fabes desde la noche anterior. Al día siguiente, los escurriremos y enjuagaremos.
Luego, pondremos los fabes en una olla grande y los volveremos a cubrir con caldo de pescado. La cantidad de fumet variará según el tamaño de la olla. Lo importante es que el nivel de líquido sobrepase el nivel de los granos.
Ahora vamos a preparar las verduras para utilizarlas en la receta. De entrada, pelaremos la cebolla y la picaremos en cubitos, que agregaremos también a la olla.
En el caso de los ajos (solo tres dientes para esta parte de la recetlos pelaremos y los picaremos menudamente, con la ayuda de un cuchillo bien afilado. También los agregaremos a la olla.
Por último, colocaremos las hojas de laurel en la olla, con un toque de sal al gusto y otro de pimienta en polvo. Mezclaremos bien todo, antes de prender el fuego. Luego, taparemos la olla y dejaremos que se cocinen durante tres horas.
Durante la cocción de los fabes, regresaremos cada media hora para añadir un vasito de agua fría a la preparación. Esto es lo que se llama « asustar los fabes », y se hace para conservar la consistencia de los granos y tratar de evitar que se rompan o se deshagan.
Mientras que se cocinan los fabes, aprovecharemos para encargarnos de las almejas. Lo primero que haremos es ponerlas en un recipiente grande u olla, y cubrirlos con abundante agua mezclada con sal. Las dejaremos allí durante media hora.
Mientras tanto, pelaremos la otra cebolla y la picaremos en cubitos. También pelaremos el diente de ajo restante y lo picaremos menudamente, o si podemos triturarlo, mejor aún.
Una vez pasado el tiempo de remojo, sacaremos las almejas, las enjuagaremos, las limpiaremos bien y las reservaremos.
Luego, en una sartén grande (u olla antiadherente), calentaremos un chorrito de aceite. Una vez caliente, vamos a sofreír en el la cebolla y el ajo que hemos picado recientemente. Dejaremos que se cocine durante 5 minutos, a fuego medio bajo, revolviendo con frecuencia.
Cuando la cebolla comience a tornarse transparente, vamos a añadir el vino a la preparación. Añadiremos bien un toquecito de sal al gusto, igual que otro de pimienta, mezclaremos todo y bañaremos con el vino.
Enseguida agregaremos también las almejas y taparemos la sartén u olla. El objetivo es dejar que se cocinen algunos minutos, para que se abran.
Una vez abiertas las almejas, la retiraremos del calor y las reservaremos hasta que casi se acabe el tiempo de cocción de los fabes.
Después de esta etapa, lavaremos el perejil, lo escurriremos y lo picaremos muy menudamente. Luego, lo reservaremos para el final de la receta.
Cuando le queden unos 15 minutos de cocción a los fabes, vamos a probarlos para verificar la sazón. Si hace falta, la corregiremos con un poquito de sal y / o pimienta. También vamos a agregarles el azafrán o colorante, y a mezclar. Por último, añadiremos las almejas con su sofrito y vino. Taparemos de nuevo y esperaremos a que los granos terminen su tiempo de cocción.
Al final del tiempo de cocción, los fabes ya deben estar tiernos y listos para servirse. Solo queda decidir si quieres espolvorear los con el perejil mientras todavía están en la olla, o si prefieres hacerlo una vez que cada plato esté servido.