En un molde de 20-24 cm de diámetro, previamente aceitado y enharinado, coloca 1 capa de masa, ajusta en la base y laterales, presionando con cuidado.
Coloca el relleno en el molde y con ayuda de una cuchara, crea 6 hoyos o huequitos en el relleno.
Abre y vierte los huevos en los hoyos. Puedes espolvorear un poco de sal en las yemas.
Precalienta el horno por 10 minutos a 200ºC (400ºF).
Coloca la masa restante sobre el molde y presionando con los dedos junta las 2 masas. Con ayuda de un cuchillo corta el exceso de masa de los bordes y sella haciendo un repulgue (como el de las empanadas argentinas).
Con la yema de huevo batida, pinta la parte superior de la torta. Con un cuchillo corta un hueco en el centro (puede ser un círculo pequeño). Esto va ayudar a que la torta respire y no se hinche en el horno y termine tirando relleno.
Coloca el molde en la bandeja central del horno (con fuego arriba y abajo) y hornea por 45-50 minutos.
Revisa que la tapa no se tueste demasiado y si es así, coloca un papel aluminio encima.
Después del tiempo de horneado, retira del horno y deja enfriar antes de desmoldar.
Desmolda con cuidado. Corta como tarta, sirve y disfruta.