Comienza pelando y picando las chalotas. En una olla viértelas junto con el vinagre y 1 cda de estragón picado, así como 3 granos de pimienta machacados.
Espera que hierva y cocina hasta que el líquido se evapore. Retira del fuego y reserva hasta que los ingredientes estén tibios.
Agrega las yemas de huevo, incorpóralas mientras bates sin parar con una batidora de globo o eléctrica.
Agrega el agua y mezcla todo sin dejar de batir.
Coloca la olla en baño María y calienta poco a poco sin dejar de batir. Es muy importante.
Cuando la salsa comience a cambiar de consistencia, retira la olla del baño maría pero no dejes de batir en lo que se enfría la mezcla.
Cuando la mezcla esté tibia, agrega la mantequilla y sigue batiendo suave y constantemente. Es importante que la mantequilla esté a la misma temperatura que las yemas emulsionadas.
Cuando termines de agregar la mantequilla y los ingredientes se hayan incorporado de manera uniforme, cuela la salsa con ayuda de un colocar pequeño. La consistencia debe ser muy parecida a la de la mayonesa.
Prueba y agrega sal de ser necesario. Agrega otra cdta de estragón picado. Mezcla hasta que se incorpore.
Vierte la salsa en un bowl y sirve tibia. Disfruta.