Primero limpia y pela las papas y sancóchalas hasta que estén hechas. Reserva.
Pica la cebolla en tiras delgadas. Haz lo mismo con el ají amarillo.
Machaca los dientes de ajo.
El cilantro lícualo con un toque de aceite y limón hasta que se haga una pasta y reserva.
Coge una olla grande, échale abundante aceite vegetal y dora las piezas de cordero. Retíralas cuando ya estén hechas por todas sus caras.
Luego fríe en ese mismo aceite la cebolla y los ajos a fuego suave. Agrega de vuelta el cordero y condimenta con sal, pimienta y comino. Agrega también el ají amarillo, sin las semillas.
Mezcla un poco durante unos 5 minutos y a continuación agrega el vino y la cerveza. Cocina a fuego medio hasta que empiece a hervir. Echa entonces el cilantro previamente licuado.
Tapa y deja cocinar a fuego medio hasta que la carne de cordero esté suave. Calcula unos 20-30 minutos
Agrega las papas previamente cocidas y las arvejas, deja que siga cocinándose y el que líquido se seque un poco (cuidado no se seque demasiado).
Cuando esté algo espeso ya puedes apagar el fuego.
Disfruta de un delicioso seco de cordero casero.