Inicia la receta haciendo la masa. Para ello, mezcla en un bol la harina, la sal y el polvo de hornear.
Abre un espacio en el medio de la mezcla de los ingredientes secos y vierte el agua y el aceite. Con las manos, ve uniendo todo hasta que la masa se vaya formando.
Amasa muy bien hasta que consigas una textura suave. Haz de tu masa una bola, guarda en un bol con un pañito húmedo y reserva en un lugar fresco.
Precalienta el horno a 180° C.
Toma el brócoli y separa los arbolitos, si están muy grandes, corta a la mitad.
Toma la cebolla y los pimientos, pélalos y córtalos en finas tiras. Reserva.
Ralla el queso mozzarella.
Toma una bandeja y engrasa.
Enharina tu encimera y estira la masa muy bien. Pasa a la bandeja y adapta su forma.
Esparce la salsa de tomate en la masa e incorpora el queso mozzarella.
Posteriormente, pon el brócoli, la cebolla y los pimientos. Culmina agregando la cucharada de orégano bien distribuida sobre la pizza.
Una vez tu pizza está armada hornea por aproximadamente 20 a 25 minutos hasta que la masa quede bien dorada y los vegetales estén cocidos.
Retira la pizza del horno y corta en porciones. ¡Disfruta!