En un procesador de alimentos o licuadora, agrega los plátanos congelados, la leche de coco y esencia de vainilla. Mezcla hasta que se integre todo.
Forra una fuente de horno con papel para hornear y vierte la mezcla del plátano. Distribuye la mezcla de manera uniforme y congela por un mínimo de 2 horas.
Antes de retirar el helado del congelador, prepara la mezcla del chocolate. En un recipiente agrega el chocolate negro y el aceite de coco para luego derretir en el microondas durante 1.5 minutos o hasta que se derrita por completo.
Deja enfriar un poco el chocolate y luego mezcla con el arroz inflado.
Retira la mezcla del plátano del molde y córtalo en cubitos.
Sumerge los bocados en la mezcla de chocolate hasta que estén completamente cubiertos.
Colócalos en una bandeja con papel para hornear y congela.
¡Disfruta!