Precalienta el horno a 200ºC.

Toma un molde de pastel rectangular mediano, engrásalo y enharínalo

Con una batidora eléctrica acrema la mantequilla hasta que tome una contextura esponjosa. Seguidamente agrega el edulcorante granulado y bate hasta que se forme una masa espumosa.

Agrega los huevos a la mezcla, uno a la vez. Sigue batiendo hasta que queden totalmente incorporados. Agrega la harina de trigo y luego la vainilla. Para este momento ya tendrás una masa un poco más espesa. Todo bien.

Vierte toda la masa en el molde que previamente tenías engrasado y enharinado y hornea hasta que, al momento de introducir un tenedor, éste salga limpio. También la costra debería estar dorada en este momento

Deja enfriar.

Mezcla la crema para batir con la cucharadita del edulcorante hasta que obtengas una espuma suave. Resérvala.

Corta un pedazo de bizcocho, barnízalo con la mermelada de fresas con ayuda de una brocha, decóralo con la crema que hiciste previamente y ponle algunos trozos de fresas recién picadas (lavadas y desinfectadas previamente) en la superficie.

¡Ya está! Allí tienes tu pastel de fresas, libre de azúcar, para disfrutar en familia ya que rinde mucho.