En un recipiente seguro para microondas, calienta la leche por 40-45 segundos, debe estar tibia (no hirviendo).
Vierte la leche en un bowl grande y espolvorea la levadura. Cuando veas burbujas, agrega azúcar, huevo, yema y la mantequilla derretida. Mezcla hasta que los ingredientes se integren (puedes hacerlo con un batidor de globo o en la batidora eléctrica).
Agrega la harina y sal. Mezcla con una cuchara de madera hasta que la masa comience a formarse.
Cambia el gancho de tu batidora por uno para amasar y enciéndela a velocidad media por 8 minutos. La masa debe formar una bola ligeramente pegajosa, si está muy pegajosa y sigue en el fondo del bowl, agrega 2 cda extra de harina.
Retira la masa del bowl y coloca en otro recipiente bien engrasado. Cubre con envoltura plástica y una toalla tibia. Dejamos que esponje por 1-1.5 horas (hasta que duplique su tamaño).
Una vez que la masa haya aumentado su tamaño, pásala a una superficie limpia y bien enharinada. Extiéndela con una rodillo hasta tener un rectángulo de 35x20 cm.
Unta en la masa la mantequilla a temperatura ambiente, dejando un espacio de medio centímetro en el lado opuesto de la masa.
En un tazón pequeño combina el azúcar morena y la canela. Espolvorea la mezcla sobre la masa con mantequilla y frota ligeramente para que se pegue.
Enrolla la masa, comenzando por el lado más corto y hacia el lado que dejamos sin mantequilla, para poder sellar los bordes lo mejor posible.
Corta en rebanadas de 2-3 cm con un cuchillo de sierra.
Coloca los rollos en un molde o recipiente para hornear previamente engrasado. Cubre con una envoltura plástica y toalla tibia. Deja reposar por 30-45 minutos.
Precalienta el horno a 180ªC. Retira la envoltura y toalla de los rollos. Mete al horno y cocina por 20-25 minutos o hasta que los bordes estén ligeramente dorados.Déjelos enfriar durante 5-10 minutos antes de glasear. Rinde 9 rollos de canela. Déjalos enfriar por 5-10 minutos antes de colocar el glaseado.
Para el glaseado, colocamos en un bowl limpio el queso crema, mantequilla, azúcar glas y extracto de vainilla. Bate hasta que la mezcla esté suave y esponjosa.
Unta el glaseado sobre los rollos de canela con ayuda de una espátula. Sirve y disfruta.