Vamos a iniciar nuestra receta, vamos a batir los huevos en un bol hasta que tengan una consistencia espumosa.
Une la harina con la sal y la vas a colocar en la encimera de tu cocina o tabla de trabajar, y abre un espacio en el medio tipo volcán. Añadirás el agua y los huevos el centro.
Con la ayuda de tus manos, iniciarás el proceso de amasado por 10 minutos hasta obtener una textura homogénea, suave y muy manejable.
Harás de tu masa una bola, la guardarás en un bol, tápala con papel film y deja reposar en la nevera por 1 hora aproximadamente.
Terminado el tiempo de reposo, vas a dividir la masa en dos y las vas a estirar hasta conseguir un grosor de 1cm aproximadamente. Te recomiendo dividirla para que se te haga más fácil extender.
Una vez tengas tu masa extendida, vas a cortarla en cuadrados medianos. Lo ideal es que sea 12x12 para que todos tengan el mismo tamaño.