Vamos a iniciar nuestra receta, haciendo una salsa con los chiles y una cebolla. Procede a asar un poco estas verduras en un sartén o plancha sin aceite. Cuando estén doraditas vas a licuar con un vaso de agua hasta formar una pasta bien rojiza. Reserva.
En una cazuela grande, añade un poco de aceite de oliva. Cuando esté caliente, vas saltear la taza de chorizo hasta dorar. Retira cuando estén en su punto y reserva.
En ese misma cazuela, vas a saltear las costillas de cerdo por aproximadamente 5 minutos. Debes mover siempre para que no se peguen. Pasado este tiempo, retira y reserva.
Agrega en la cazuela una cucharada de aceite y añade la cebolla cortada y el ajo fileteado. Mezcla hasta que se doren.
Luego, incorpora la taza de chorizo y las costillas de cerdo.
Añade los frijoles, la sal al gusto, la pimienta, el comino y las hojas de laurel. Vierte también la salsa de chile. Mezcla hasta integrar todo.
Vierte un litro de agua aproximadamente, mezcla y cocina a fuego medio por 40 minutos el promedio. Debes mezclar cada 12 minutos para que no se pegue.
Pasado este tiempo, tus frijoles deben estar bien cocidos y las costillas en su punto junto al caldo cremoso. Si está muy líquido, deja cocinar por unos minutos más.
Apaga y sirve caliente. ¡Disfruta!