Inicia tu receta haciendo la masa.
En un bol vierte la harina y haz un espacio en el centro. Luego, agrega la manteca, el huevo y el agua.
Con las manos, vas a ir integrado la harina para el centro y ve amasando por un largo tiempo hasta que se una muy bien y te quede una masa uniforme.
Haz de tu masa una bola y guarda en el mismo bol con un pañito húmedo y deja reposar hasta que hagas tu relleno.
Toma la cebolla, pela y corta en cuadritos.
Calienta un sartén con aceite y sofríe un poco. Luego, añade una cucharada de agua y termina de sofreír a fuego lento para que la cebolla se caramelice.
Es turno de añadir la núez moscada, un poco de sal y mezcla. Apaga.
Luego, mezcla la cebolla con el puré de papas hasta que quede bien integrado. Reserva.
Toma tu masa, y la vas a extender en la encimera de tu cocina previamente enharinada. Cuando esté extendida y delgada, corta en discos pequeños.
Procede a rellenar con una porción pequeña en el centro de cada disco, luego vas a humedecer en las orillas de del disco, doblas y presionas con un tenedor para sellarlas bien.
Hierve una olla con agua y cocina tus pierogi por 10 o 15 minutos hasta que se ablanden y endurezcan. Te recomiendo cocinarlas por parte para que no se peguen.
Retira del agua, deja escurrir y degusta con alguna salsa.
¡Disfruta!