Pre-calentamos el horno a 180 ºC (arriba y abajo, horno tradicional).
Cortamos las puntas superiores. Los corazones deben asomarse y verse los pétalos.
Ponemos las alcachofas con los pétalos sobre la mesada y presionamos con la palma de la mano para que se abran ligeramente y las hojas se separen entre sí.
Colocamos las alcachofas en una fuente apta para horno, con las hojas separadas hacia arriba, y regamos cada una de ellas con un chorrito de aceite de oliva virgen extra y sazonamos.
Introducimos la bandeja con las alcachofas en el horno, que debería estar caliente para entonces, y asamos durante 45-60 minutos.
Cuando las alcachofas estén tiernas en su interior, retiramos la bandeja del horno y las dejamos reposar unos minutos antes de manipularlas.
Emplatamos y servimos. Disfrutamos.