En un bol vertemos el agua tibia y la levadura y mezclamos hasta que se diluya totalmente. Dejamos reposar por 10 minutos.
En otro recipiente o bol grande colcamos el medio kilo de harina. Hacemos un hueco en el medio y colocamos la sal en la parte externa. En la parte interna vamos a verter poco a poco el agua con la levadura diluida cuidando que no se mezcle directamente con la sal.
Con la ayuda de una paleta de madera o con la mano vamos integrando de adentro hacia afuera la mezcla, hasta que el agua haya absorvido la totalidad de la harina.
Empezamos a amasar sobre un mesón enharinado buscando darle una textura más lisa a nuestra masa.
Volvemos a ponerla en el bol tapándola con papel film, y dejamos levar mínimo 40 minutos hasta que duplique su tamaño.
Colocamos la masa sobre la mesada con un poco de harina, y amasamos 2 minutos y armamos un chorizo con la masa y luego cortamos círculos con un cuchillo. A mi me salieron 12 panes mediano pero si quiere hacerlos más grande o más pequeños es su decisión.
Estos círculos los vamos a redondear para que al aplastarlos tenga una textura liza y se horneen parejo.
Con la ayuda de un rodillo vamos a estirar los círculos hasta que tengan 1 cm de grozor. Estitamos de cada lado unas 3 veces pasando el rodillo 2 veces, una de arriba a abajo y otra de abajo a arriba.