Coloca una olla con suficiente agua hirviendo. Lava tu pulpo muy bien.
Cuando tu agua esté caliente, introduce tu pulpo.
Cuando el agua inicie a hervir, toma un tenedor y vas a remojar el pulpo, es decir sacar y meter del agua por aproximadamente 4-5 veces. Esto permitirá que los cambios de temperatura, ayuden a la cocción.
Deja cocinar tu pulpo por 40 minutos hasta que la masa esté blanda y suave.
Pasado este tiempo, sacarás tu pulpo y lo meterás en un bol con agua fría para cortar la cocción. Reserva un poco del caldo.
Procederemos a cortar la cebolla y los pimentones en cuadritos pequeños o brunoise. Filetea el ajo.
Coloca un sartén a calentar muy bien con aceite de oliva. Primero, sofríe el ajo. Luego añade la cebolla y le pimentón, mezcla y deja cocinar por 3 minutos.
Ahora, añade el vino blanco y un poco del caldo donde se cocinó el pulpo. Menos de una taza. Condimentarás con sal y pimienta y dejarás cocinar por 5 minutos.
Mientras el líquido de nuestro sofrito se reduzca, procede a cortar en pequeños trozos el pulpo y se lo añadirás a la mezcla. También agrega la paprika.
Mezcla muy bien hasta que todo se integre y el pulpo tome todos los sabores. Cuando el líquido se haya reducido y nuestro guiso esté seco, apagarás el fuego y dejarás reposar para usarlo en las empanadas.