Harina de almendras casera, hoy en Comedera te guiaremos para que logres hacerla sin complicaciones y comiences a descubrir que es posible comer saludable sin mucho esfuerzo.
Una vez que nos adentramos al mundo de la alimentación saludable, rápidamente nos damos cuenta de que hay muchísimas maneras de cambiar la comida a la que nos hemos acostumbrado desde pequeños por versiones más sanas.
Te traemos esta vez la receta de harina de almendra, que puedes emplear para muchísimas preparaciones como: tortas, pan, galletas, panquecas.
A pesar de su contenido calórico relativamente alto, las almendras son grandes aliadas en lo que se refiere a la forma física. Su alto contenido en proteínas, fibra y calcio no solo es beneficioso para la salud, sino que también reduce el apetito.
No contiene gluten, es de bajo índice glicémico, por estas y por muchas otras razones resulta ser una aliada a la hora de preparar postres saludables.
La manera de prepararlas es muy sencilla, sólo necesitas remojarlas en agua para luego poder retirar la cáscara en la que vienen y se licuan y listo.
Pasemos por ahora con el detallado paso a paso para que aprendas cómo hacer harina de almendras casera.
Harina de almendra casera: receta fácil
Ingredientes
- 400 gr de almendras
- agua
Elaboración paso a paso
- Selecciona las almendras, y agrégalas a un bol.
- Agrega agua hirviendo a las almendras, deben cubrirlas por completo.
- Retira del agua y cuando ya estén frías, y puedas tomarlas con las manos, comienza a pelarlas.
- Pon a calentar una sartén a fuego medio, tuesta las almendras para quitar toda la humedad.
- Agrega las almendras tostadas a un vaso de la licuadora.
- Tritura las almendras con una licuadora o procesador.
- Listo, ya tienes la harina para preparar postres o lo que quieras.
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Recomendaciones para la harina de almendra
- Si quieres hacer menos grasosa la harina puedes prensarla con un paño de cocina y así lograrás que la harina de almendras pierda grasa, por lo que se reduce el valor calórico.
- Si no las deshidratas o doras antes de triturarlas, la harina te quedará con una consistencia más pastosa.
- Tamiza la harina de almendras para eliminar todos los pedacitos que hayan podido quedar.
- Si te sobra harina de almendras, guárdala en un tarro de cristal hermético y en la nevera, para preservar al máximo su frescura.
- Puesto que la harina de almendra no contiene gluten, es ideal para incorporar a dietas para celíacos.
- También puedes tostarlas al horno sobre una bandeja, la intención de exponerlas al calor es para que pierdan la humedad del remojo y puedas obtener una harina y no una pasta. Si la necesitas para hacer panquecas o torta puedes omitir el proceso de secado, obtendrás una harina pastosa.
Recetas con almendras
- Almendras garrapiñadas
- Galleta de almendras
- Crema de almendras con jengibre
- Helado de almendras casero
- Pan de almendras
- Salsa de almendras
Video y fotos: Grosby Group.