Hoy haremos una receta que no se puede llamar vegana porque contiene queso, pero si suples el queso por uno vegetal puedes ser perfectamente una quesadilla vegana.
Soy gran fan de la comida mexicana, bueno, realmente de toda la buena comida, pero ésta, particularmente es una propuesta alegre y súper deliciosa ideal para compartir con tus seres queridos en un día de celebración o, simplemente, el día que te antojes por unas deliciosas quesadillas hechas con menos calorías de lo normal.
Puedes rellenarlas con verduras, legumbres, carnes y embutidos. Puedes hacer la masa por ti misma pero si el hambre apremia puedes hacer las quesadillas con tortillas de las que venden en el supermercado.
Empecemos con esta rápida receta de quesadillas de brócoli y quinoa.
Cómo hacer quesadillas con brócoli y quinoa
Ingredientes
- ½ taza quinoa
- ½ taza brócoli picado
- 1 taza queso rallado
- Sal y pimienta al gusto
- 4 tortillas de trigo
- 1 cdta aceite de oliva
Elaboración paso a paso
- En una olla pequeña, cuece el brócoli bien lavado por 5 minutos.
- En otra olla agrega la quinoa y cocina a fuego medio durante 10-15 minutos.
- Cuando esté listo, retirar agua.
- En un recipiente, mezcla el brócoli, la quinoa, el queso, un poco de sal y pimienta.
- Mezcla y unifica todo.
- Divide la mezcla uniformemente sobre la mitad de cada tortilla, doblar la parte superior de la tortilla en el llenado.
- En un sartén a fuego medio, agrega un poco de aceite de oliva, coloca las quesadillas y cocina hasta que estén doradas.
- Aproximadamente 1 minuto de cada lado.
- Corta por la mitad y sirve.
Nutrition
Algunos consejos para esta quesadilla
- El componente mayoritario del brócoli es el agua, por lo que su valor calórico es muy bajo. Su contenido en fibra es abundante y colabora significativamente a tener un mejor tránsito gastrointestinal.
- Elige los brócoli que tengan racimos pequeños y compactos, de color verde-morado brillante y el tallo firme y bien cortado. No escojas aquellos que tengan las flores abiertas, estén blandos o de color amarillento.
- Una vez en casa, se recomienda no lavar el brócoli – para evitar que se oxide y almacenarlo en la parte baja de la heladera en bolsas de plástico perforadas, por un lapso de tres a cinco días. Si no se refrigera se pone fibroso y leñoso con rapidez, y con el paso de los días, envejece y desarrolla sabores fuertes desagradables.
- El secreto para que la quinoa te quede bien, es que la laves súper bien. Debes frotarla suavemente con las manos, bajo el agua, para que desaparezca la capa que recubre a la semilla. Luego, la hierves en abundante agua. El punto exacto para saber que el grano está bien cocido es que quede suelto y esponjoso.
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Fotos y videos de Grosby Group.