Seamos principiantes o expertos, tener una colección de especias es muy importante si queremos conseguir esos sabores caseros que impresionan a todos.
Pero esta colección no se hace en 1 solo día, así que no te espantes cuando revises nuestra lista de sugerencias que no pueden faltar en tu cocina.
Lo importante es que comiences con aquellas que corresponden al tipo de comida que más te gusta y avanzar a partir de ese punto. Te dejamos nuestra lista, junto con algunas recomendaciones importantes, ¡empecemos!
¿Frescas o molidas?
Los expertos recomiendan tener especias enteras y molerlas en casa, ya que esto proporciona olor y sabor a los platillos que a veces no se consigue con las especias previamente molidas.
Pero lo cierto es que muchos de nosotros preferimos la segunda opción por su practicidad, conservación y facilidad de encontrarlas en nuestro supermercado más cercano. Así que nuestra recomendación es tener una mezcla de frescas y molidas, de acuerdo al uso que le des a cada una.
¿Cómo guardar las especias?
- Se recomienda que las especias que no uses frecuentemente las guardes en envases oscuros o dentro de la alacena donde no reciban el sol.
- Aquellas que usas con más frecuencia, las puedes guardar en recipientes herméticos.
- Si transfieres tus especias a recipientes, es importante que pongas la fecha de compra o caducidad y que las huelas cada par de meses para asegurarte que todavía tienen olor, de no ser así, es momento de tirarlas.
- Las especias molidas pierden su olor y sabor en un par de meses, mientras que las especias enteras (guardadas apropiadamente) pueden durar hasta 1 año.
Photo by Calum Lewis
Especias básicas para tener en la cocina
- Ajo en polvo: ideal para sacarnos del apuro cuando no tenemos ajos frescos a la mano.
- Albahaca: ideal para los platillos italianos. Combina perfecto con orégano, limón, salsa de tomate y ajo.
- Canela: te recomendamos tener la versión molida y varitas a la mano. Ideales para platillos y bebidas dulces. Agrega un toque de sabor muy especial al curry, chilli y estofados.
- Cardamomo molido: ayuda a intensificar los sabores dulces de los platillos, es una especia ligera y floral con notas de cítricos.
- Cebolla en polvo: similar al ajo en polvo, es un salvavidas cuando no tenemos cebolla fresca o queremos reducir algún tiempo de preparación.
- Clavo molido: usado en platillos de Asia, África y Medio Oriente. Ideales para darle sabor a la carne, curry y marinados.
- Comino: te recomendamos tener la versión molida y fresca (semillas). Usado en platillos mediterráneos y de la India. Proporciona un sabor cálido a los estofados, curry, salsas espesas y escabeches.
- Curry en polvo: esta mezcla es una combinación de hasta 20 especias y es ideal para agregar un sabor completo y diferente a los platillos.
- Extracto de vainilla: perfecta para darle sabor a postres.
- Hojas de laurel: súper potente, por lo que generalmente se usa 1 o dos hojas para dar sabor a sopas, estofados y marinados.
- Jengibre molido: usado en la cocina de la India, China, Japón y Vietnam. Puedes ocuparla en galletas, pasteles y pan. Aprovéchala para ablandar carne o darle un giro a platillos con mariscos.
- Nuez moscada molida: ideal para postres y bebidas calientes. Puedes usarla en sopas, vegetales horneados y platillos con papa.
- Orégano: te recomendamos la versión seca, ya que es más aromática que la fresca. Se usa en la comida italiana americana y acompaña perfecto platillos con vegetales, carne, pescado y hasta ensaladas.
- Paprika: esta especia suma sabor y color a cualquier platillo, desde carnes hasta sopas.
- Pepperoncini: estas hojuelas de chile son ideales para agregar a salsas, pizzas y sopas.
- Pimienta de cayena: usualmente se usa en platillos de la India, así como en la cocina Cajún. Ideal para darle un toque picosito que no abruma.
- Pimienta negra entera: te recomendamos invertir en un molinillo para pimienta y si quieres resaltar el sabor de la especia, puedes tostar las pimientas antes de molerlas.
- Romero: esta especie tiene un olor muy particular que nos recuerda al limón y pino. Se usa en las cocinas mediterránea, italiana y francesa. Combina muy bien con ajo y aceite de oliva.
- Sal kosher: se hace sin yodo y los cristales nos dan más control sobre la cantidad que usamos, pero no se recomienda en recetas al horno que usan poco líquido, porque no se disuelven por completo.
- Tomillo: popular en la cocina mediterránea, cajún y criolla. Ideal para darle un toque suave y amanerado a vegetales, carne de res y pollo.